El pasado 11 de marzo, tuve ocasión de asistir a una reunión sobre Educación y Salud organizada por una asociación sin ánimo de lucro, la asociación Andrés Laguna de Segovia de la que es Presidente uno de nuestros profesores de Alimentación, Javier Tejedor. Es admirable la labor que desarrolla este grupo de profesionales de la salud (médicos, veterinarios, psicólogos, farmacéuticos, fisioterapeutas, enfermeros) de forma totalmente altruista hacia la promoción de la salud y educación en hábitos saludables en todos los aspectos que tienen relación con nuestra salud: alimentación, actividad física, higiene postural, prevención de consumos de riesgo (droga, tabaco y alcohol). En esta reunión se dieron a conocer algunos de los programas de prevención y también de manejo o intervención en problemas ya instaurados.
Los problemas ya los tenemos aquí (sobrepeso, obesidad, lesiones de espalda, consumo de alcohol a edades tempranas, drogadicción) y en muchos casos hay que intervenir para reconducirlos hacia estados más saludables. Por esta razón hay tantos programas tanto de promoción (“Cinco al día”, Perseo, Naos, Programa SI) como de de intervención (“Tira del hilo”, “Moneo”, “Discover”, “Construyendo salud” ). Deberíamos plantearnos seriamente que la prevención es nuestra mejor arma y es en la escuela, además de en la familia, donde esta debe llevarse a cabo.
En el tema que a mí me incumbe que es la alimentación, opino que debería ser obligada la formación desde la escuela infantil y continuar en primaria, secundaria e incluso bachillerato.